¿Qué esconden las personas calladas?

Cuando piensa en alguien tranquilo, ¿en qué tipo de adjetivos piensa? Quizá le vengan a la mente palabras como tímido o reservado.

Si alguna vez has estado cerca de una persona que suele ser callada, es posible que hayas empezado a preguntarte qué esconden exactamente cuando no hablan.

¿Las personas calladas nos ocultan algo? ¿O tal vez simplemente no les damos la oportunidad de hablar y mostrarnos quiénes son en realidad?

Aunque ser una persona callada puede parecer aislante a veces, hay muchas ventajas que conlleva ser más introvertido.

Cosas sobre las personas calladas que probablemente no sabías

No es su culpa, es la biología, a diferencia entre los introvertidos y los extrovertidos tiene su origen en la biología, esto significa que no puedes controlar si eres más introvertido o extrovertido, simplemente forma parte de tu personalidad.

Los introvertidos procesan la energía y la información en sus cerebros de forma diferente a los extrovertidos, esto significa que tienen niveles más bajos de dopamina, un neurotransmisor que nos hace sentir excitados, felices y con energía.

Por ello, necesitan asegurarse de tener suficiente tiempo para descansar y recargar las pilas para poder funcionar al máximo, por eso, muchos introvertidos prefieren trabajar en entornos tranquilos y con poca estimulación.

Tienden a ser más empáticos, la mayoría de la gente cree que los extrovertidos son más empáticos que los introvertidos, sin embargo, las investigaciones demuestran que no es así.

La empatía es la capacidad de comprender y conectar con lo que viven los demás, los estudios demuestran que los introvertidos tienen un mayor nivel de empatía que los extrovertidos.

Mientras que los extrovertidos se sienten naturalmente atraídos por las personas y las cosas, los introvertidos se centran más en lo que ocurre dentro de su cabeza.

Esto significa que suelen estar atentos a sus propias emociones y a las de los demás, al estar tan atentos a sus emociones, los introvertidos suelen ser más sensibles a los demás; y tienen la capacidad de comprender plenamente lo que experimentan los demás, también puede hacerlos más vulnerables a las emociones, tanto buenas como malas. Asimilan todo lo que les rodea, los estudios han demostrado que las personas calladas son más propensas a procesar todo lo que ocurre a su alrededor.

Esto se conoce como atención desenfocada, este tipo de personas están repasando todo lo que están experimentando, así como lo que ocurre a su alrededor.

Se centran en todo, lo que significa que no pueden sintonizar completamente con ninguna cosa, esto es más bien lo que hacen los extrovertidos.

Los extrovertidos están más naturalmente sintonizados con lo que sucede a su alrededor, no procesan realmente lo que experimentan, pero sí lo que ven.

Pueden estar sentados en una sala de juntas y escuchar a todo el mundo hablar, pero no están escuchando realmente, sólo observan cómo se desarrolla la reunión y lo asimilan todo.

Como las personas silenciosas asimilan todo, están asimilando algo más que lo que está ocurriendo delante de ellos, las personas calladas son realmente observadoras y perceptivas.

Como también están atentos a sus propios pensamientos y sentimientos, también son perceptivos a lo que experimentan y sienten.

Esto significa que suelen ser capaces de relacionarse con los demás y comprender sus emociones y pensamientos mejor que los extrovertidos.

Esto puede convertirlos en grandes amigos y compañeros, ya que son capaces de proporcionar mucho apoyo, como las personas calladas suelen ser más perceptivas, pueden notar cosas de los demás que otros no ven.

Pueden notar que alguien no se siente bien o que un colega necesita un consejo, están más en sintonía con lo que ocurre a su alrededor, lo que les convierte en grandes oyentes.

Ser más introvertido tiene muchas ventajas, los introvertidos pueden ser más empáticos y perceptivos que los extrovertidos, también pueden ser más observadores y suelen ser grandes oyentes.

Si eres introvertido, no dejes que tu naturaleza tranquila te impida ser quien eres, no tienes que ser ruidoso y extrovertido las 24 horas del día, sólo tienes que encontrar el equilibrio adecuado entre cuándo hablar y cuándo callar.

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