¿Cómo hacer hablar a una persona callada?

¿Has conocido alguna vez a alguien que sea tan silencioso que, incluso después de hablar con él durante algún tiempo, te resulte difícil saber lo que piensa? Nunca comparten sus puntos de vista u opiniones sobre nada.

Puede que te hayas encontrado con este tipo de personas varias veces en tu vida, pero la pregunta sigue siendo: ¿cómo se consigue que se abran?

Aceptémoslo, todo el mundo tiene sus momentos de silencio y eso está perfectamente bien. Sin embargo, si intentas entablar una conversación con alguien que apenas habla y da respuestas monosilábicas a casi todo lo que le preguntas, las cosas pueden empeorar.

Pero hay buenas noticias, hay muchas maneras de hacer hablar a una persona silenciosa.

Prueba estos consejos y comprueba si a ti también te funcionan.

• Hacer preguntas, No puedes esperar que alguien te diga lo que piensa o siente si no le das la oportunidad de hablar. Si les haces preguntas y escuchas realmente sus respuestas, se sentirán más cómodos hablando contigo.

Si es un estudiante, pregúntale por sus notas. Si es un profesional, pregúntale por su trabajo. Pídeles que te hablen de su infancia, de sus libros favoritos, películas, música, deportes, aficiones, etc.

Así crearás una conversación y será más fácil que se abran y hablen contigo.

• Ve a un retiro en silencio con ellos, Esto puede sonar un poco extremo, pero puedes probarlo si estás desesperada y no sabes de qué otra manera conseguir que se abran.

De este modo, ambos estaréis en silencio, lo que facilitará que se abran y hablen. Pero si no hablan, no les presiones; deja que pase y espera el momento adecuado.

Hay muchos retiros de silencio a los que puedes acudir con otras personas que no quieren hablar. Estos retiros suelen ser muy espirituales y te ayudan a ser más consciente de tus propios pensamientos y emociones.

También puedes probar un retiro de meditación de atención plena. Esto te ayudará a ser más consciente de tus propios pensamientos y sentimientos.

• No te lo tomes como algo personal, Si la persona con la que hablas es muy silenciosa, puede que sufra de ansiedad social. En este caso, no podrá hablar con nadie que conozca.

Si te tomas como algo personal que una persona no te hable, te sentirás rechazado y herido. Sin embargo, si sabes que la persona puede tener ansiedad social, sabrás que no debes tomártelo como algo personal.

Si la persona tiene ansiedad social, intenta ayudarla siendo paciente. Sé amable y comprensivo, y no le presiones demasiado para que hable.

• Dirige la conversación hacia algo que le interese Si estás hablando con un amigo o un colega y está muy callado, puedes intentar dirigir la conversación hacia algo que le interese para que se abra más.

Si estás hablando de una película que te ha gustado, por ejemplo, y ves que tu amigo está un poco callado, pregúntale si la ha visto o qué opina de ella. Si la ha visto y tiene una opinión sobre ella, lo más probable es que se abra y empiece a hablar.

• Cambia el entorno y el lugar, Si la persona con la que hablas está muy callada, es posible que no esté en una situación muy cómoda. Puede que esté en un entorno que no le gusta y con gente con la que no quiere estar.

Es posible que quieras cambiar el entorno y el lugar donde estás hablando con ellos. Puedes ir a su casa o a un lugar donde se sientan más cómodos. También puedes cambiar el tema de conversación a algo que esté relacionado con sus intereses y aficiones.

El silencio no indica necesariamente que una persona no tenga nada que decir. Puede ser que simplemente no se sienta cómoda hablando contigo. Si pruebas los consejos de este artículo y sigues sin conseguir que tu persona silenciosa hable, no te preocupes.

Todo el mundo tiene sus momentos de silencio y eso está perfectamente bien.

Con estos consejos, puedes ayudar a que una persona silenciosa se abra y se sienta más cómoda hablando contigo. Prueba estos consejos y comprueba si a ti también te funcionan. Estos consejos funcionarán mejor si tienes paciencia y no te precipitas.

Nieves Sanz

Nieves Sanz es una abogada y escritora que escribe en español desde 2006. Actualmente vive en Valladolid, España, donde trabaja como abogada y editora. Su carrera literaria comenzó con la publicación de su primer poemario titulado «Tiempo» por Litoral Ediciones en 2013.